Bruschetta de tomate

15 min tiempo de cocción
Si buscas una idea de comida rápida y fácil, esta bruschetta de tomate casera es perfecta: fresca y llena de sabor. Es deliciosamente sencilla y solo tarda unos minutos en hacerse. Combina tomates cherry jugosos, albahaca fragante y una generosa capa de mantequilla Lurpak® sobre pan de masa madre crujiente. Un clásico italiano simple pero sublime, ideal como entrante o aperitivo.
Bruschetta de tomate Bruschetta de tomate

Bruschetta de tomate

  • 15 min tiempo de cocción
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Si buscas una idea de comida rápida y fácil, esta bruschetta de tomate casera es perfecta: fresca y llena de sabor. Es deliciosamente sencilla y solo tarda unos minutos en hacerse. Combina tomates cherry jugosos, albahaca fragante y una generosa capa de mantequilla Lurpak® sobre pan de masa madre crujiente. Un clásico italiano simple pero sublime, ideal como entrante o aperitivo.
Si buscas una idea de comida rápida y fácil, esta bruschetta de tomate casera es perfecta: fresca y llena de sabor. Es deliciosamente sencilla y solo tarda unos minutos en hacerse. Combina tomates cherry jugosos, albahaca fragante y una generosa capa de mantequilla Lurpak® sobre pan de masa madre crujiente. Un clásico italiano simple pero sublime, ideal como entrante o aperitivo.

Método

1
Tuesta el pan a tu gusto. Unta con capas generosas de Lurpak®.
Consejo
Tuesta el pan hasta que esté dorado y crujiente, pero con un ligero masticable en el interior. Si usas parrilla o sartén, tuéstalo en seco unos minutos por cada lado y unta la mantequilla mientras aún está caliente para que se funda de maravilla. En horno, hornea a 180 °C durante 8–10 minutos, dándole la vuelta a mitad del tiempo.
2
Corta los tomates cherry por la mitad o en cuartos, según su tamaño. Sazona bien con sal, pimienta y algunas hojas de albahaca rasgadas.
Consejo
Escurre el exceso de jugo de tomate para evitar que la bruschetta se humedezca. Tras picar los cherry, ponlos en un cuenco con una pizca de sal y deja reposar 5 minutos para que suelten líquido. Luego, escúrjalo suavemente o sécalos con papel antes de mezclar con albahaca y sazonar.
3
Coloca los tomates sobre el pan con mantequilla y sirve.

Preguntas sobre la bruschetta de tomate

La bruschetta de tomate es uno de esos platos sencillos que siempre saben increíble. Si tienes dudas para clavarla, no eres el único. Aquí respondemos a las más comunes.

  • La bruschetta es un aperitivo italiano clásico que consiste en pan tostado cubierto con diversos ingredientes. La versión más popular lleva tomates jugosos, albahaca fresca y un chorrito de aceite de oliva o mantequilla. Es fresca, sabrosa y ridículamente fácil de hacer.

  • Aunque el dúo tomate + albahaca es el más conocido, hay mucho margen para la creatividad. Puedes añadir ajo, pesto, burrata cremosa o un toque de parmesano para más sabor. Si te gusta el picante, prueba con copos de chile; si prefieres algo ácido, un hilo de glaseado balsámico funciona de maravilla.

  • Los tomates maduros y jugosos son los mejores. Los cherry son una gran elección porque son dulces por naturaleza y están disponibles todo el año. Si usas tomates grandes, elige variedades antiguas (heirloom) o Roma: gran sabor y menos semillas. Elijas los que elijas, asegúrate de que estén bien maduros.

  • Depende del tamaño. Para tomates cherry, basta con cortarlos por la mitad o en cuartos para que suelten jugo pero mantengan la forma. Para variedades mayores, córtalos en dados pequeños, de bocado. El objetivo es una mezcla lo bastante troceada para asentarse bien sobre el pan sin ser un desastre.

  • Lo mejor es disfrutarla recién hecha, pero si te sobra, guarda la mezcla de tomate por separado en un recipiente hermético en la nevera hasta un día. El pan, eso sí, tuéstalo siempre al momento; de lo contrario, se ablandará. Cuando vayas a comer, pon los tomates sobre una nueva rebanada de masa madre tostada y listo.
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Empieza a cocinar

Saborea la bruschetta de tomate fresca

De sencilla a gloriosa, la bruschetta de tomate siempre da en el clavo. Demuestra que la gran cocina no tiene por qué ser complicada. Y lo mejor: puedes prepararla en casa en solo 15 minutos.

Tuesta un buen pan de masa madre, corona con tomates cherry jugosos y albahaca fragante y disfruta de un sabor satisfactorio y lleno de matices en cada bocado. Busques un tentempié rápido, un almuerzo ligero o un aperitivo delicioso, esta receta cumple siempre.

Te esperan muchas más recetas fáciles para la cena. Prueba una deliciosa pasta con champiñones y espinacas, un jugoso ribeye con ensalada asiática de col o unas mazorcas de maíz con pimentón.

Pan de masa madre tostado y mantecoso

Una buena bruschetta de tomate empieza con un gran pan, y la masa madre es la elección perfecta. Tiene esa textura crujiente y masticable irresistible, con el punto justo de mordida en los bordes. Tostarlo realza su sabor rico y ligeramente ácido, además de darle la estructura que aguanta a la perfección todos esos tomates jugosos, absorbiendo su sabor sin volverse blando.

Con una capa generosa de mantequilla, el pan se vuelve aún más goloso: rico, dorado y absolutamente delicioso. Te dan ganas de arrancar un trocito antes incluso de poner los toppings.

Con tomates cherry jugosos y albahaca fresca

Corona el pan de masa madre tostado con tomates cherry jugosos y albahaca fresca. La dulzura de los cherry maduros, rebosantes de jugo, se encuentra con el toque fresco y ligeramente picante de la albahaca, creando una combinación simple pero totalmente adictiva.

Aunque muchas variedades funcionan bien, los cherry tienen una ventaja clara: son consistentemente dulces y firmes. Como se consiguen todo el año, no hace falta esperar a la temporada alta para disfrutarlos. Una pizca de sal y pimienta saca lo mejor de las verduras y deja que sus jugos se mezclen de maravilla con el pan crujiente y mantecoso. Con un solo bocado te preguntarás por qué no la haces más a menudo.

Prueba un entrante y aperitivo italiano clásico

La bruschetta no solo está riquísima: también es un pequeño bocado de tradición italiana. Existe desde hace siglos y se dice que nació entre productores de aceite de oliva que usaban pan para catar su aceite recién prensado. Con el tiempo, los toppings evolucionaron y el dúo tomate + albahaca se convirtió en un clásico.

Hoy, la bruschetta de tomate es un imprescindible en cocinas y restaurantes italianos. Ligera pero satisfactoria, llena de sabor y perfecta para empezar una comida sin arruinar el apetito. Sírvela a tus invitados o date un capricho trayendo un poco de magia italiana a tu mesa.

Añade tu toque

La bruschetta ya es una obra maestra de la sencillez, pero eso no significa que no puedas hacerla tuya.

Si te encanta el ajo, frota un diente sobre la masa madre tostada y aún caliente antes de untar la mantequilla. Aporta la profundidad salada justa sin eclipsar la frescura de los tomates y la albahaca. O, si quieres ir a por todas, pica fino un poco de ajo y mézclalo directamente con los tomates para un golpe extra.

Si de verdad quieres llevarla al siguiente nivel, la burrata cremosa es el camino. Romper ese queso suave y delicado y dejar que se funda con los tomates convierte una bruschetta sencilla en algo absolutamente indulgente. Remata con un chorrito de buen aceite de oliva y un glaseado balsámico.

¿Buscas algo inesperado? Prueba a machacar un poco de aguacate sobre la tostada antes de añadir los tomates: cremoso, mantecosa y espectacular. O, como toque final, ralla un poco de parmesano por encima para un punto salado que lo unifica todo de forma preciosa.

Mantenla clásica, póntela elegante o juega hasta encontrar tu versión perfecta.

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