800 g de filete de salmón sin piel 200 g de espinaca baby 75 g de berro 1 limón, su ralladura 1 echalote, picado en trozos 25 g de mantequilla Lurpak® con sal 1 pizca de nuez moscada 1 pizca de pimienta molida 1 pizca de sal 200 g de crema fresca 1 huevo batido 500 g de masa de hojaldre 1 puño de harina
Comienza tu sesión precalentando el horno a 200°C. Luego, derrite la mantequilla en un sartén a fuego medio y agrega el echalote picado. Cocina hasta suavizar y retira del fuego. En un sartén grande suaviza las espinacas junto con un poco de nuez moscada y unas cucharadas de agua. Retira y pásalas por debajo del chorro de agua fría para detener la cocción, luego ponlas en un colador para eliminar el exceso de agua. Coloca las espinacas, la nuez, la mantequilla Lurpak®, el echalote, la ralladura de limón y la crema fresca en un procesador de alimentos. Muele sólo con un par de toques. Sazona a tu gusto con sal, pimienta y nuez moscada. Enharina una superficie de trabajo y divide la masa hojaldrada en dos. Procura que queden del tamaño del salmón, sólo dejando un par de centímetros de cada lado.
Coloca una pieza de la masa en una charola para hornear, luego pon una capa de la mezcla de espinacas al centro y coloca el salmón encima. Moja las orillas usando una brocha con agua y coloca encima la otra parte de la masa. Presiona las orillas con las manos o con un tenedor para sellar. Haz unos cuantos cortes superficiales y barniza con huevo. Lleva al horno durante 25 minutos o hasta que dore.
